RENTABILIDAD DEL STANDARD AND POORS 500 EN EL PERIODO 1950-2010 ¿ES IMPORTANTE EL MARKET TIMING AL INVERTIR EN BOLSA?
Artículo que presenta dos estudios del índice bursátil de la bolsa americana Standard and Poors 500 (S&P 500) y su rentabilidad histórica, uno realizado por Fidelity y otro por Antonio Alcocer que analiza las estrategias de inversión de fondos con políticas activas de gestión (“market timing”) y las pasivas mediante seguimiento de índices bursátiles a través de ETFs.
El artículo también analiza cuál sería el efecto como inversor en el S&P 500 (índice de precios, es decir, minusvalora la rentabilidad real obtenida por el índice ya que no considera los dividendos pagados -aquellos índices que incluyen los dividendos se llaman de retorno absoluto o “total return”-) en el periodo 1950-2010 si hubiéramos seguido una política de inversión de gestión pasiva con ETFs, es decir, olvidarnos de las fluctuaciones de la bolsa durante el periodo de inversión, despreocupándonos si ésta sube o baja, y sólo teniendo en cuenta el momento en que hacemos la inversión y el momento de salida (este momento de salida se ha estudiado para ventanas 5 años, 10 años y 15 años). Y como he aclarado, es una rentabilidad menor a la obtenida por el índice porque se ha analizado el S&P 500 índice de precios sin dividendos (el que dan los medios de comunicación) y no índice de retorno absoluto. Si incluyéramos dividendos la rentabilidad podría incrementarse entre 1%-3% anual.
1. ESTUDIO DE FIDELITY SOBRE EL MARKET TIMING
Os presento un estudio realizado por la gestora de fondos Fidelity sobre el papel que juega el “market timing” (intentar “predecir” el mercado buscando el momento óptimo de inversión) a la hora de realizar una inversión en bolsa, es decir, si es adecuado una estrategia de inversión/desinversión en bolsa frente a una estrategia de seguir en todo momento invertidos independientemente de cómo estén evolucionando los mercados.
El estudio se realizó en el periodo de tiempo 1990-2006 para los mercados americano (S&P500), británico (FTSE All share), Alemania (Dax 30), Francia (CAC 40) y Hong Kong (Hang Seng). Por ejemplo para el mercado americano, índice S&P 500, la rentabilidad anualizada en el periodo 1990-2006 de haber estado invertido en todo momento es del 11,5%, frente al 8,1% (si me hubiese perdido los 10 mejores días de inversión/mayores ganancias), 5,4% (me pierdo los 20 mejores días), 3,1% (me pierdo los 30 mejores días), 1,1% (me pierdo los 40 mejores días). La primera conclusión que se obtiene es que al intentar predecir el mercado es fácil perder los momentos de ganancias.
Adicionalmente el estudio refleja que la rentabilidad extra que podría lograrse si fuéramos capaces de predecir correctamente el momento óptimo de inversión no es tan grande y por ello insuficiente para compensar la rentabilidad que sacrificaría si se equivoca. Según el estudio, invertir en el “día correcto” apenas influye en las inversiones a largo plazo. El estudio para ello estudia 3 escenarios de inversión que se realizan anualmente en el periodo 1990-2006, invirtiendo en el punto más “bajo/barato” de todo el año, en el punto más “alto/caro” y en una fecha aleatoria. Para el S&P500, la rentabilidad anualizada fue del 12,6%, 11,7% y 11,9% respectivamente. Entre los 3 escenarios la diferencia de rentabilidad es casi del 1%. Fidelity concluye que en inversiones a largo plazo lo que importa es el tiempo, es decir, estar siempre invertidos y no el momento óptimo (intentar predecirlo).
Sobre esta temática hay mucho debate en la comunidad inversora y dos posiciones antagónicas enfrentadas: defensores de la gestión activa (gestores que cobran comisiones de gestión al cliente en teoría por generar alfa, rentabilidad generada por la gestión, aunque no siempre lo consiguen) frente a defensores de la inversión pasiva (diversificación de la cartera por activos, seguimiento mediante ETFs de varios índices sin entrar y salir constantemente del mercado y reajustando y rebalanceando la cartera anualmente en relación al ratio renta fija-renta variable fijado según el perfil de riesgo del inversor).
¿Quien tiene razón? Los primeros siempre y cuando generen “alfa” (elección de los gestores y fondos premium, como Warren Buffen y su Bershire Hathaway con rentabilidades anuales compuestas del 20% en el periodo 1965-2009 vs 9% del benchmark o para el caso español como Francisco Paramés y su Bestinfond con rentabilidades compuestas anualizadas del 15,66% en el periodo 1993-Julio 2015); los segundos si atendemos al estudio de Fidelity, que argumenta que realmente hay muy pocos gestores en el mercado que sean capaces de batir a los principales índices bursátiles en el largo plazo.
Os dejo un archivo Excel que simula el dinero que tendré dentro de “n” años en un fondo de inversión con costes anuales del 1,75% para una estrategia de inversión pasiva a largo plazo (como la que propone el estudio de Fidelity) con una rentabilidad anual conocida, y cuánto dinero recuperaré.
2. RENTABILIDAD DEL STANDARD AND POORS 500 EN EL PERIODO 1950-2010
Para concluir comentaros que el debate está ahí, y aquí también os dejo un estudio donde realizo un análisis del S&P500 en el periodo de tiempo 1950-2010, con ventanas de inversión a 5, 10 y 15 años respectivamente, recorriendo toda la curva del S&P 500 sin deshacer la inversión en la ventana de tiempo elegida. Las conclusiones vienen a apoyar la idea “lanzada” por Fidelity en su estudio. En el horizonte de inversión de 10 años, la rentabilidad anualizada promedio obtenida de todas las posibles ventanas de inversión a 10 años en el periodo 1950-2010 es del 7,41% con una desviación típica del 4,66%, siendo la rentabilidad anualizada mayor que cero un 92% de las veces (11638 ventanas de 10 años sobre 12619 ventanas posibles). Para el caso de ventanas de inversión a 5 años, la rentabilidad anualizada promedio de las 13870 ventanas de inversión a 5 años posibles fue del 7,57% con una desviación típica del 6,84%, siendo un 83,3% de las veces mayor que cero. Para el horizonte temporal de 15 años de inversión, la rentabilidad anual promedio fue del 7,44% con una desviación típica del 3,68%, siendo el 100% de todas las ventanas de inversión mayor que cero. Es decir, que si invertimos nuestro dinero en un horizonte temporal a 15 años, y adoptamos una estrategia de inversión pasiva sin entrar y salir del mercado, los datos reflejan que nunca se perdió dinero por parte del inversor.
Saludos a todos,
www.antonioalcocer.com